La investigación sobre el asesinato del fiscal paraguayo Marcelo Pecci, ocurrido en mayo de 2022 en una playa de Barú, Colombia, enfrenta un nuevo obstáculo tras la muerte de Francisco Luis Correa Galeano, considerado el principal testigo del caso.
Correa Galeano falleció recientemente en la cárcel La Picota, en Bogotá, tras ser atacado con un cuchillo, un hecho que ha generado preocupación en la familia del fiscal y podría afectar el curso de las pesquisas.
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Según se conoció en la mañana de este martes 7 de enero, la esposa de Pecci, Claudia Aguilera, envió tres cartas dirigidas a la Policía Nacional de Colombia, la Fiscalía General de la Nación y el Ministerio de Justicia, expresando su inquietud por las implicaciones que este hecho podría tener en la investigación.
En los documentos, Aguilera señaló que la muerte de Correa Galeano era un riesgo que ya se había advertido previamente, dada la relevancia de su testimonio en el proceso judicial. “La noticia de su deceso nos ha afectado considerablemente, ya que se había advertido que ello podía suceder”, se lee en las cartas, según consignó el medio.
Correa Galeano había colaborado con las autoridades colombianas al proporcionar información clave que permitió la captura y condena de varios implicados en el asesinato de Pecci, entre ellos los hermanos Andrés Felipe Pérez Hoyos y Ramón Pérez Hoyos, así como Margareth Chacón.
A cambio de su cooperación, el testigo había negociado con la Fiscalía una reducción de su pena. Sin embargo, su muerte, que según un informe preliminar habría sido el resultado de una riña con otro interno, deja un vacío en el caso y plantea dudas sobre la seguridad en los centros penitenciarios.
La familia de Pecci, que reside en Paraguay, ha solicitado una reunión virtual con las autoridades colombianas para discutir el avance de la investigación. En particular, buscan dialogar con el director de la Policía, el general William René Salamanca; la fiscal Luz Adriana Camargo; y la ministra de Justicia, Ángela María Buitrago.
Según detalló la misiva, la familia considera que, aunque se ha logrado identificar y procesar a los responsables materiales del crimen, aún no se ha avanzado lo suficiente en la identificación de los autores intelectuales, quienes habrían ordenado el asesinato del fiscal.
“Ante la falta de avances en la investigación, así como este último grave episodio del asesinato de quien era considerado “testigo clave”, solicitamos una reunión virtual con la señora Fiscal General del Estado, ya que se ha comprometido a seguir avanzando en el proceso, y que hemos tomado su palabra, en cuanto a la voluntad de seguir buscando a los autores intelectuales”, se lee en el documento enviado a la fiscal Camargo.
Además, Claudia Aguilera recordó a la fiscal general el compromiso del ente investigador para esclarecer la muerte de Pecci, entre otras, por la falta de compromiso de las autoridades paraguayas para continuar con las investigaciones.
“Habíamos advertido la confianza en el trabajo de la Fiscalía General de la Nación a su cargo, ya que en la justicia local no encontramos respuestas, avances, ni voluntad de seguir con el proceso investigativo, así como nos han cerrado todas las puertas”, comenta el documento.
Asimismo, la viuda del fiscal Marcelo Pecci explicó las razones por las que solicitó un encuentro virtual en el que, además, exigió que cuente con la presencia de la abogada Cecilia Pérez Rivas, además de Francisco Pecci, hermano del funcionario paraguayo.
“La solicitud de reunión virtual radica en la imposibilidad de trasladarnos hasta Colombia, dado el riesgo al cual nos vemos expuestos todos, tanto los abogados como miembros de la familia, teniendo en cuenta la información que habíamos recibido desde la penitenciaría local”, se lee en las cartas.