El presidente del Comité Provincia de la UCR, Marcos Ferrer, salió al cruce de las críticas de la oposición de Más Radicalismo que rechaza una convergencia con la Libertad Avanza (LLA) de Javier Milei para las Legislativas 2025, en el distrito que luce pintado con furia de violeta. Otro sector interno de extracción alfonsinista demanda un plebiscito entre los afiliados.
“Es prematuro hablar de alianzas”, contrarrestó el socio político del diputado Rodrigo de Loredo ante la movida insistente “anti Milei” del espacio referenciado en Ramón Mestre, Carlos Becerra y Fernando Montoya, que resiste entregarse “a la dádiva de un poquito del calor del poder”.
“El partido tiene mecanismos institucionales para tomar decisiones en cuanto a sus posiciones políticas y su marco de alianzas”, afirmó Ferrer a Perfil Córdoba al poner un freno a la avanzada opositora interna, que reaccionó ante los pasos que viene dando De Loredo en sintonía con el gobierno de Milei.
Ante la consulta por el planteo del propio diputado radical de buscar como “plan A” una alianza con el poder libertario, de cara a los comicios legislativos, quien encabeza la conducción del radicalismo cordobés declaró que “todas las alianzas posibles las discutirá el partido cuando llegue el momento”.
“Discutir hoy un marco de alianzas en el partido es prematuro”, sentenció el intendente de Río Tercero ante el debate anticipado por el “factor Milei” que avivó la interna radical en territorio mediterráneo, con la mirada puesta en las elecciones de medio término, donde De Loredo debe renovar su banca, aunque no se sabe con qué escudería competirá.
El objetivo de máxima es sellar una mega alianza con los hermanos Milei junto al resto de la oposición en el distrito que más apoyo recibe el libertario. La otra opción es reconstruir la coalición Juntos por el Cambio a la cordobesa y salir airoso en el choque de fuerzas con el poder libertario.
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En ambos casos, el deloredismo fogonea que su líder encabece la nómina de candidatos a la Cámara Baja. La Lista 3 –pura– es el sueño de unos pocos.
Rechazo opositor
“El radicalismo no tiene dueño”, lanzó la oposición boina blanca con tonada al apuntar duro contra el jefe del bloque UCR en Diputados, quien se muestra como un aliado de Milei, por arrogarse “una representación que no posee”.
En los últimos días, De Loredo blanqueó que la UCR tiene “un plan A” de converger con LLA, aunque esto depende de la venia de Milei. En el caso de que no se logre esa coalición, el referente radical aportó “un plan B”, que sería una alianza con sectores del PRO que responden a Mauricio Macri.
Ante esos escenarios, Más Radicalismo rechazó en duros términos ambos posibles entendimientos electorales que tiene en mente De Loredo. En ese plano, calificó de “autoritario” al gobierno de Milei que “no respeta la Constitución, las leyes y las instituciones”.
Y, sobre el PRO de Macri, Mestre y sus aliados internos afirmaron que “se ha entregado sin condiciones al partido gobernante”, mientras que “en Córdoba, en su gran mayoría, forman parte del oficialismo”.
Tras sostener que la UCR “ha recuperado su autonomía” y en su rechazo a “ir por detrás de fuerzas políticas que le obligan a diluir su identidad”, el alineamiento radical “sin peluca” le advirtió a De Loredo que deberá “respetar la decisión” de la Convención Nacional y esperar a que el Congreso Partidario provincial defina su política de alianzas para 2025.
Otro sector interno demandó un plebiscito entre los afiliados radicales. El alfonsinista Dante Rossi propuso que el 4 de mayo se celebre esta especie de consulta popular “para que sean ellos los que resuelvan si una coalición con la Libertad Avanza es un límite para la UCR”, aportó. “No es un tema que puedan resolver los dirigentes, entre cuatro paredes”, remató.
En el mar de fondo de la interna boina blanca, que irá cobrando fuerza con el correr de los plazos electorales, el diputado ostenta el poder de la lapicera en el radicalismo de la provincia. Tiene mayorías que le responden en la cúpula de la UCR y en el máximo órgano partidario que define las alianzas en Córdoba. Llegado el momento hará valer su peso.