El poderoso empresario Sergio Tasselli lo es, en buena medida, por la cobertura judicial de la que goza. Dueño de la planta Petroquímica Bermúdez, ubicada en la ciudad homónima del cordón industrial luego traspasada a su hijo Máximo, viene sorteando un juicio por la considerada mayor contaminación ambiental de la provincia de Santa Fe tras el cierre de las instalaciones, con graves fallas de seguridad incluso cuando estaba en funcionamiento.
El jueves de la semana pasada, Luis Schiappa Pietra, uno de los fiscales que impulsa la investigación del caso, explicó en qué instancia está y los reiterados obstáculos para que continúe puestos por los propios Tribunales,.
La causa es por los daños ambientales y las responsabilidades de los empresarios involucrados. Los vaivenes son extensos. Fue cerrada en 2019, pero posteriormente reabierta gracias a la insistencia de fiscales y organizaciones ambientales. Y de nuevo clausurada.
Largo derrotero de idas y vueltas
En 2020 se solicitó la anulación del archivo de la causa, argumentando que el cierre fue prematuro y que las irregularidades detectadas en el proceso requerían un análisis más profundo.
Dos años después, la Cámara de Apelación en lo Penal de Rosario dio lugar a esta solicitud y ordenó continuar con la investigación, al considerar que los acusados ni siquiera habían sido citados a declarar.
A fines de 2024, tras un nuevo recurso de las defensas de Tasselli, la Corte Suprema de Justicia de Santa Fe resolvió que no correspondía reabrir el caso, declarando la existencia de cosa juzgada.
Clausuradas las vías en Santa Fe, los fiscales que impulsan la causa presentaron un recurso ante la Corte Suprema de Justicia de la Nación. Incluso, tienen como posibilidad llevar el caso a instancias internacionales si el blindaje judicial incluye al máximo tribunal de la Argentina.
Schiappa Pietra explicó en Capitán Bermúdez las idas y vueltas de la investigación sobre el dramátcio pasivo ambiental que dejó la petroquímica, cuyos efectos nocivos para la salud de los habitantes y el medio ambiente continúan.
La convocatoria fue del Taller Ecologista de Rosario bajo la consigna “Novedades en la causa Petroquímica Bermúdez: ¿ganará la impunidad?”. De la misma participaron Cecilia Bianco, coordinadora del área Tóxicos de la ONG, y Florencia Sívori, abogada de la organización.
El fiscal repasó el derrotero del caso, que involucra a un ex par condenado por corrupción y a un ministro nacional.
El mayor caso de contaminación ambiental de Santa Fe
La ex Petroquímica Bermúdez fabricaba gas cloro como principal producto, una sustancia venenosa y corrosiva. Su inhalación en pequeñas cantidades afecta las vías respiratorias. En el predio había presencia de sustancias altamente tóxicas en niveles 50 veces más altos que los tolerables para la salud de las personas.
Un perito oficial, el ingeniero Andrés Salum, verificó en su momento, entre otras irregularidades, contenedores de cloro a la intemperie en mal estado, estructuras que contenían material peligroso para la salud deterioradas, tanques rotos donde se guardaban sustancias químicas como benceno, amianto y mercurio, y derramamiento de estos químicos en la tierra.
La planta del cordón industrial cerró en 2013, y dejó un pasivo ambiental que se suma al que había heredado de su antecesora, Electroclor. Quedaron abandonadas 23 hectáreas de suelo altamente contaminado, según los análisis hechos por peritos oficiales y de organizaciones ambientales.
Serjal, la primera traba
Las trabas a la investigación, en efecto, comenzaron con un pedido del ex fiscal regional Patricio Serjal a un fiscal –entonces su subordinado– de San Lorenzo para que cierre la causa ante el juez Juan José Tutau. Es decir, que retire las acusaciones contra los empresarios Sergio y Máximo Tasselli. El magistrado accedió.
La defensa de padre e hijo la encabezó el abogado Mariano Cúneo Libarona hasta el mismo momento en que fue designado ministro de Justicia de la Nación.
Serjal cayó en desgracia cuando se destapó su encubrimiento de una red de juego clandestino en Santa Fe, a partir de las declaraciones del arrepentido empresarioo de ese negocio Leonardo Peiti.
Coraza protectora para los Tasselli
Schiappa Pietra solicitó entonces la nulidad de la resolución que clausuraba la causa bajo el argumento de que carecía de base legal. El juez de primera instancia Carlos Gazza consideró que el fallo anulatorio era injustificable, porque a su par no le habían presentado los informes que constataban los altos niveles de contaminación, y lo anuló. La decisión fue avalada por unanimidad por los magistrados Georgina Depetris, Alfredo Ivaldi y Carolina Hernández, de la Cámara de Apelaciones de Rosario.
No hubo caso: la defensa de los Tasselli apeló ante la Corte Suprema de Justicia de Santa Fe, que por mayoría votó a favor del cierre del proceso judicial.
“Estamos en desacuerdo con ese fallo. La Corte de la Provincia resolvió a favor de la defensa, argumentando que no podía continuar la investigación debido a una resolución tomada en San Lorenzo que archivaba la causa”, explicó Schiappa Pietra.
Corte Suprema, otro blindaje
El fiscal expresó además su sorpresa por el fallo dividido (4 a 3). Es que fue con la convocatoria de un conjuez para desempatar, que votó a favor de la petroquímica sin notificación a la Fiscalía.
La postura que beneficiaba a Tasselli fue sostenida entonces por Rafael Gutiérrez, María Angélica Gastaldi, Eduardo Spuler y el conjuez Fernando Gentile Bersano. En pos de reanudar la investigación votaron Roberto Falistocco, Mario Netri y Daniel Erbetta.
Schiappa Pietra reiteró que pese a la decisión de la Corte provincial, junto a su par José Luis Caterina, también presente en la charla del Taller Ecologista, continúan accionando para que la investigación se reabra.
“Estamos discutiendo el caso en la Corte Suprema de la Nación. Esperamos que pronto tengamos una respuesta y podamos avanzar en la acusación y el juicio de los responsables de la contaminación”, se esperanzó durante la charla organizada por el Taller Ecologista.
“Los delitos ambientales, como el de Petroquímica Bermúdez, son crímenes permanentes”, subrayó el fiscal sobre la necesidad de retomar la causa.