No todos gustan de adentrarse unos cuantos metros en el océano Atlántico para ir a pescar en pleno invierno. El frío se hace sentir, y son muchos los aficionados que le esquivan a ese plan. Otros, no tienen miedo a las bajas temperaturas ni a una salpicada entrando, solo se preocupan de ir bien abrigados para no sufrir y van por una pesca que, por estos tiempos, es de las más calificadas de la temporada. Hablamos de meros y salmones, dos de las atracciones para el pescador en este invierno 2025 en la zona de Claromecó, dentro del partido de Tres Arroyos.
Allí, en el coqueto balneario tresarroyense es nuestra referencia en Weekend Web, desde hace años, Juan Dibbern, quien es el capitán de Audaz, una lancha para seis pescadores que sale desde Claromecó y quien, semanalmente, nos mantiene informados de cómo viene la pesca en la zona. A diferencia de otros prestadores que trabajan solo en temporada, en este caso su labor se extiende a todo el año, permitiéndonos pescar múltiples especies y disfrutar en cualquier estación de la pesca deportiva.
A pesar de las ganas de estar en el agua, los amigos de Audaz sufrieron los embates del clima. Habían pasado casi dos meses sin entrar al mar, cuando por fin, el martes 8 de julio, volvieron a hacerlo. La idea era probar la piedra para ver si llegaron los primeros meros.
El día no podía ser mejor a la hora de entrar, una mañana fantástica en cuanto a clima, una máxima de 14° C que se anunciaba para la tarde. Todo pintaba lindo pero la pesca no quería acompañar. La variada fue casi nula, con una llamativa ausencia de besugos y pescadillas, dos de los caballitos de batalla entre las especies invernales. Fueron porfiando las distintas piedras en forma constante, hasta que dieron con una que empezó a pagar bien.
Meros y salmones de excelente talla fueron apareciendo, con la salvedad de que solo una de las piedras era la que rendía y entregaba capturas. No quedó otra que apostar por ella. El viento que apareció en un momento del día conspiró y había que buscarlo pegado a las piedras, ya que si se alejaba solo unos metros la actividad era nula, situación que llevó a trabajar mucho con el ancla para caerles encima. Así, dieron con lindas extracciones en un inicio de temporada muy interesante, aunque todavía falta para ponerse buena la cosa.
Nos decía Juan que hasta octubre van a estar a pleno con esta pesca del mero y salmones en la zona, solo queda bancar el frío y buscar los días indicados para poder entrar sin salpicarse mucho. La invitación está hecha, pescar embarcados en el mar en pleno invierno puede ser un gran plan.
Servicios:
- Excursiones de pesca en Claromecó, Audaz. Tel.: (02983) 445335. En redes, Instagram y Facebook.