En Argentina, solo el 44% de los bebés son amamantados de forma exclusiva hasta los seis meses y la vuelta al trabajo es una de las principales causas de abandono, según el Ministerio de Salud.
Cada año, del 1 al 7 de agosto, se celebra la Semana Mundial de la Lactancia Materna, una fecha impulsada por la Alianza Mundial para la Acción en Lactancia Materna (WABA), junto con la OMS y UNICEF, para visibilizar el impacto positivo de la lactancia en la salud de bebés y madres, y promover entornos que la protejan.
En este contexto, los espacios de lactancia dentro de las empresas se vuelven una herramienta fundamental para garantizar que esta práctica no se interrumpa al volver al trabajo.
En Argentina, los “Espacios Amigos de la Lactancia” son ambientes acondicionados dentro del ámbito laboral, que permiten a las madres lactantes extraer y conservar su leche en condiciones de privacidad, seguridad e higiene.
Estos espacios son más que una comodidad, ya que responden a una necesidad concreta. Según datos oficiales del Ministerio de Salud, a pesar de que el 97% de los niños/as inicia la lactancia, solo el 44% son amamantados en forma exclusiva entre el nacimiento y los 6 meses, siendo la reincorporación al trabajo uno de los motivos más importantes de abandono de la lactancia.
Hasta el momento, 256 instituciones de todo el país han sido reconocidas oficialmente como Espacios Amigos de la Lactancia, tras cumplir con los estándares de acceso, privacidad, mobiliario adecuado, bacha, heladera y condiciones de higiene.
Promover la lactancia en el ámbito laboral no solo responde a estándares de salud pública y derechos humanos, también consolida culturas organizacionales más empáticas, responsables y centradas en las personas.