Una mujer denunció que un chofer de Uber intentó secuestrar a su hija.
La madre de la joven aseguró que el conductor del Uber se desvió del camino previsto por la aplicación de viajes y ella detectó el cambio de rumbo.
Tras alertar al 911, agentes de la Policía de Santa Fe interceptaron al chofer de Uber que se había desviado de su recorrido establecido por la aplicación de viajes.
La mujer explicó que ella le llamó un Uber a su hija para que volviera a su casa, pero notó que el chofer se desvió del recorrido establecido por la aplicación.
«Le mandé un mensaje a mi hija preguntándole si estaba todo bien y me respondió que estaba asustada», relató angustiada la mujer.
Y agregó: «El conductor le quería sacar el teléfono, diciéndole que él me iba a contestar».
La mujer se dirigió rápidamente al punto del mapa donde aparecía el Uber que llevaba a su hija y al llegar al lugar encontró a un móvil policial que ya había interceptado el viaje.
Los uniformados encontraron en el baúl del auto un machete y una soga, pero la presencia de esos objetos en el baúl y el desvío que hizo en el viaje pactado no sirvieron para lograr la detención del chofer.
«El oficial me dijo que no le podían hacer nada porque mi hija no había sido agredida. Esto debería ser considerado un intento de secuestro», insistió la mujer.
«Hay que estar atentos, porque no se puede estar tranquilo», relató la mujer.