WASHINGTON.- Luego de que una versión periodística en Estados Unidos asegurara que el Departamento de Seguridad Nacional (DHS, por sus siglas en inglés) había puesto en pausa el proceso para que la Argentina ingrese al Programa de Exención de Visa, fuentes argentinas en Washington al tanto de la negociación desmintieron a LA NACION el contenido del artículo publicado por el sitio Axios, y remarcaron que el programa “sigue desarrollándose sin inconvenientes”.
Las fuentes calificaron la información publicada esta mañana, que generó inmediata repercusión en la Argentina, como “falsa y maliciosa”.
Más tarde, a través de un posteo publicado en sus redes sociales, el DHS también desmintió la información publicada por el sitio norteamericano. “Lo que resulta realmente ‘vergonzoso’ es que Axios lo considere periodismo. Como les dijimos, no había ningún documento nuevo ni adicional relacionado con el Programa de Exención de Visas pendiente de firma con la Argentina. El DHS espera trabajar con funcionarios argentinos en el futuro“, señaló.
Según señalaron las fuentes argentinas, el programa “sigue desarrollándose sin inconvenientes”, el personal de la embajada argentina ha mantenido reuniones de coordinación en los últimos días con las agencias correspondientes y “todo avanza adecuadamente”.
Las fuentes destacaron que el programa no solo no está interrumpido, sino que están dinamizando los procesos para lograr resultados lo antes posible, tal como sostuvo la secretaria de Seguridad Nacional, Kristi Noem, en su viaje reciente a la Argentina, donde fue recibida por el presidente Javier Milei; la ministra de Seguridad, Patricia Bullrich, y el canciller, Gerardo Werthein.
LA NACION pudo confirmar con otra fuente que la última reunión técnica entre los equipos del DHS y de la embajada argentina se produjo el viernes pasado, y que allí ningún miembro de la delegación norteamericana planteó inconvenientes para avanzar en el acuerdo, sellado en un viaje de Noem a Buenos Aires el 28 de julio pasado.
Ambos equipos continuaron con el intercambio de información para cumplir con el checklist de los requisitos para que la Argentina sea aceptada para entrar al programa.
Según el medio especializado Axios, el supuesto freno momentáneo a la medida había sido informado mientras que funcionarios del gabinete de Milei −entre ellos Juan Pazo, titular de la Agencia de Recaudación y Control Aduanero (ARCA)− viajaban a Washington para firmar el acuerdo. Esto habría ocurrido, advirtió el medio, debido a una “falta de comunicación y organización” por parte de Noem.
Las fuentes consultadas por LA NACION mostraron su sorpresa por esa versión, y aclararon que el viaje reciente de Pazo a Washington no tuvo relación con el programa de Visa Waiver (VWP, por sus siglas en inglés), lo que, destacaron, demuestra la falsedad de la información difundida por el sitio.
Este miércoles, Pazo también salió al cruce de la versión difundida por Axios. “Fueron tres días de trabajo y cooperación con las autoridades del gobierno norteamericano, que en nada coincide con lo que están tratando de mostrar las notas periodísticas. Debo aclarar que la visita de la delegación de ARCA nada tiene que ver con la implementación del VWP”, afirmó.
“Viajamos junto al Director General de Aduanas a Estados Unidos en el marco del trabajo conjunto que venimos realizando ambos gobiernos con la Oficina de Aduanas y Protección Fronteriza [CBP, por sus siglas en inglés] y el ARCA, que mantenemos regulares intercambios para asegurar las fronteras de ambos países y facilitar el comercio legítimo”, señaló Pazo.
“Para avanzar en el convenio y poner en marcha el programa tenemos que adecuar la tecnología de control aduanero. Desde 1994, año en que se implementó el sistema María, el sistema de información aduanera nunca se actualizó. También es una realidad que la mayoría de la tecnología de la Aduana tiene más de 20 años, es obsoleta y deficiente para controlar carga y pasajeros de acuerdo a estándares internacionales”, añadió el funcionario.
Según Axios, como parte del acuerdo la Argentina había acordado dejar de utilizar un software chino en el área de Aduana para utilizar productos de proveedores norteamericanos.
Además, el artículo indicó que el Departamento de Estado, que lidera el secretario Marco Rubio, también habría manifestado su preocupación por el escándalo de presunta corrupción que sacude a la administración de Milei. Se planteó la intención, de acuerdo a la publicación estadounidense, de tener más discusiones con la Argentina sobre este caso de llegar a un acuerdo de visas.
LA NACION envió una consulta al Departamento de Estado para corroborar la versión publicada por Axios, pero hasta el momento no obtuvo respuesta. El DHS remitió al tuit publicado esta tarde.
Según la versión de Axios, firmada por el periodista Marc Caputo, Noem no informó previamente a Rubio sobre la importante decisión de suscribir un acuerdo de intención con la Argentina por la Visa Waiver.
Rubio y la jefa de gabinete de la Casa Blanca, Susie Wiles, habrían redactado entonces un memorándum para recordar a todos los funcionarios que necesitaban autorización previa para ejecutar ese tipo de acuerdos, de acuerdo a lo publicado por el sitio.
“Digamos que no nos pareció bien”, señaló, según la versión de Axios, un alto funcionario de la administración Trump, que luego agregó: “Es vergonzoso”. Sobre esa frase fue que se hizo eco el poste del DHS para desmentir la publicación del medio norteamericano.
La Casa Blanca ha estrechado lazos con el Gobierno a raíz de la buena sintonía entre el presidente Donald Trump y Milei, que han mantenido diversos encuentros en Estados Unidos.
“No hay ningún documento nuevo ni adicional relacionado con el VWP pendiente de firma con la Argentina”, declaró a Axios un alto funcionario del DHS en un comunicado escrito, que utilizó las siglas del programa de exención de visas. “Esperamos colaborar con ellos en el futuro”, añadió.
El DHS administra el VWP en coordinación con el Departamento de Estado que lidera Rubio.
Cómo se gestó el acuerdo
El primer paso concreto para avanzar en el proceso que le permita al país reingresar al VWP comenzó el 1° de mayo pasado.
Ese día, equipos técnicos del DHS, a cargo de Noem, y de la embajada argentina en Washington, que lidera Alec Oxenford, empezaron a trabajar para definir la viabilidad del proyecto. Estados Unidos presentó una especie de autoevaluación para determinar si la Argentina podía cumplir con los estrictos requisitos que implica el programa, que hoy tienen 42 países.
Cuando los equipos vieron que era viable, que no había nada que impidiese avanzar con el programa, se empezó con el trabajo técnico, señaló a LA NACION una fuente al tanto de las negociaciones en Washington.
El acuerdo que firmaron Noem y Milei en la Casa Rosada le dio un impulso a los grupos de trabajo, añadió la fuente, que destacó el entusiasmo en el equipo técnico norteamericano tras el regreso de la secretaria de Seguridad Nacional de su viaje a Buenos Aires.
En sus evaluaciones, los equipos técnicos argentinos determinaron que la aplicación del proyecto era factible y que no había ninguna “bandera roja”. Se aseguraron de que el acuerdo no vulnerara la soberanía, ni los datos personales de los argentinos, ni los datos de propiedades del país, y que fuera dentro de los estándares de la industria.
Tras la concreción de la autoevaluación y un estudio exhaustivo, el siguiente paso llegó el 9 de junio pasado, cuando Oxenford le entregó en mano una nota, que expresaba la intención de la Argentina de entrar al VWP, a Simon Bland, de la Oficina de Estrategia, Políticas y Planes del DHS, y que por elevación llegó a Noem.
Fue una muestra de la voluntad del país de acceder al programa, y el asunto tomó un carácter más formal, indicaron en Washington, donde se señaló que, en caso de concretarse, el programa significará un upgrade para los procedimientos de seguridad en la Argentina.