Ganadora de un premio Oscar de la Academia de Hollywood, la artista se dio a conocer para el gran público como Kay Adams en la célebre película “El Padrino”, de 1972, que dirigió Francis Ford Coppola
Una triste noticia se conoció este sábado por la tarde, cuando trascendió que a los 79 años, en su residencia de California, murió la icónica actriz de Hollywood Diane Keaton, una de las figuras más queridas y singulares del cine estadounidense. Por el momento no se han dado más detalles acerca de las causas del deceso, y sus seres queridos han pedido “respeto y privacidad en este momento de duelo que atraviesa la familia”.
Keaton, cuyo nombre verdadero era Diane Hall y había nacido en Los Ángeles en 1946, se convirtió en un ícono del cine gracias a una carrera que abarcó más de cinco décadas con títulos que fueron del drama y la acción a la comedia.
Su salto a la fama llegó en la década de 1970 con su interpretación de Kay Adams, la novia y más tarde esposa de Michael Corleone en la película El Padrino que en 1972 dirigió Francis Ford Coppola.
Más allá de esta película convertida con el tiempo en un clásico del cine, la intérprete ganó un Oscar por su papel en Annie Hall y se hizo con dos Globos de Oro y un Bafta. También fue conocida por su trabajo en películas como El padre de la novia o El club de las primeras esposas.
La actriz fue además una de las musas de Woody Allen, y apareció en películas como El Dormilón (1973) y La última noche de Boris Grushenko (1975), además de la referida Annie Hall (1977) que claramente representó una bisagra en su carrera.
Keaton aceptó a continuación papeles diferentes para evitar quedarse como el estereotipo de su personaje en Annie Hall. Se convirtió en una consumada actriz dramática, empezando con Buscando al Sr. Goodbar (Looking for Mr. Goodbar, 1977), sin duda uno de sus mejores papeles dramáticos, y fue nuevamente candidata al Oscar por Reds (1981) y Marvin’s Room (1996).
Algunas de sus películas recientes más populares incluyen a Father of the Bride (1991), The First Wives Club (1996) y Something’s Gotta Give (2003). Además de actriz era fotógrafa, corredora de propiedades inmobiliarias y cantante ocasional. Su actuación en Buscando al Sr. Goodbar convirtió a Keaton en sex symbol, del mismo modo que su particular forma de vestir hizo de la actriz un icono de la moda en los años 70, con sus conocidos trajes de impronta masculina.
Keaton había comenzado a estudiar actuación en el Neighborhood Playhouse de Nueva York. Inicialmente, estudió bajo la técnica de Meisner; hecha popular en los años 20 por Sanford Meisner, un director de actores de Nueva York.
Según su compañero de reparto en Reds, Warren Beatty: “Diane asumía un libreto como una obra de teatro porque tenía la obra entera memorizada antes de que uno empiece a hacer la película; no conozco a ningún otro actor que hiciera eso”.
El primer gran éxito de Keaton desde los años 90 llegó en 2003 con Alguien tiene que ceder, dirigida por Nancy Meyers y con Jack Nicholson de coprotagonista. Se consideró atrevida la elección de Nicholson y Keaton, por entonces de 66 y 57 años de edad respectivamente, para protagonizar una comedia romántica. Twentieth Century Fox, el estudio original, declinó producir el film, temiendo que las estrellas eran demasiado viejas para tener éxito.
Keaton comentó acerca de la situación en Ladies’ Home Journal: “Aceptémoslo, las personas de mi edad y de la de Jack son mucho más profundas, mucho más sensibles, porque han visto mucho de la vida. Tienen una gran cantidad de pasión y esperanza. ¿Por qué no deberían enamorarse? ¿Por qué las películas no deberían mostrar eso?”.
Diane Keaton hizo el papel de una dramaturga de mediana edad que se enamora del novio de su hija, mucho mayor que ésta. El film fue un gran éxito de taquilla, y Roger Ebert escribió: “Nicholson y Keaton aportan tanta experiencia, conocimiento y humor a sus personajes que el film funciona de una manera que no se habría esperado del guion”.
La actriz recibió su segundo Globo de Oro en la categoría cómica-musical y su cuarta candidatura al Premio de la Academia por su papel en el recordado film.