La juventud del PRO intenta acelerar la candidatura del ex presidente Mauricio Macri para las próximas elecciones legislativas con carteles en la vía pública en algunos puntos de la ciudad de Buenos Aires. «Mauricio 2025» es la consigna que utilizó la militancia del partido amarillo para alentar la postulación del ex mandatario, quien todavía no definió si será protagonista en los comicios de medio término, ni tampoco –supuestamente– la política de alianzas. Pero ese continuo vaivén entre el PRO y La Libertad Avanza más parece una operación publicitaria para quedar en el centro de la escena y de las cámaras que alejamientos y acercamientos reales entre ambas fuerzas.
Los afiches aparecieron luego de que el jefe de Gobierno porteño, Jorge Macri, había dejado entrever que su primo podría ser candidato. Lo hizo durante un acto porteño del PRO y ahí sí está claro que es parte de una estrategia para alambrar territorios en los que el partido talla fuerte. A diferencia del oficialismo, que tiene billetera, y aliados que más parecen a título oneroso que gratuitos, el PRO sigue surgiendo hasta ahora como carta imbatible en la ciudad de Buenos Aires y gobierna dos provincias, Chubut y Entre Ríos.
«Ojo que una vez dijeron: «Armen un partidito y ganen las elecciones», y lo hicimos. Guarda que se viene Mauricio Macri candidato, me va a matar ahora», soltó el alcalde porteño en un acto partidario en el Club Cultural y Deportivo 17 de Agosto.
Y desafió: «Y encima el tipo nació en provincia, tiene domicilio en ciudad, la puede seguir a Cristina donde haga falta».
De igual modo, no parece viable que Macri se lance en un territorio hostil como la provincia de Buenos Aires, cuando tiene suelo propio hasta por apellido en el distrito porteño.